El tema que nos trae hoy en esta entrada es de gran interés, pues las opiniones son muy diversas dependiendo de la experiencia personal, la moralidad, cultura o ideología.
Mientras que todos nos hemos topado con personas que dictaminan que estudios son útiles para la vida y cuáles no, otros hemos tenido experiencias con gente que ha supuesto grandes cambios en nuestra forma de entender la perspectiva de este tema, llegando a la conclusión de que no hay ningún aprendizaje inservible, sino que de una forma u otra cualquier conocimiento es adecuado y nos hace mejorar distintos aspectos, habilidades o aptitudes.
Al terminar su intervención, nuestros compañeros nos ofrecieron un espacio de debate en el que podíamos comentar un opinar acerca de los distintos aspectos que habían tocado a lo largo de su proyecto. Y por ello, en voz alta, expliqué que el algo que siempre me ha molestado es esa gran discriminación que sufre el mundo del arte.
Actualmente, se relaciona mucho el mundo laboral con los estudios que quieras cursar. Dependemos de un trabajo para subsistir, por ello muchas veces, no se eligen los estudios de tus sueños o que te motivan sino, que recurre es a otros donde poder tener un sueldo que te permita vivir (al menos cómodamente)
Yo, personalmente, considero que cualquier aprendizaje o adquisición de conocimientos es bueno tanto para nuestro cerebro como para nuestra vida personal y laboral. A información que culturiza, otra enriquece como persona y otra te prepara para el futuro.
Por poner un ejemplo:
Algo muy útil en la vida cotidiana es la educación emocional y la educación sexual y sin embargo ninguna de ellas está presente como una materia en las enseñanzas de los centros escolares, como tampoco lo está los primeros auxilios. Por otro lado, la historia o la parte más avanzada de las matemáticas se considera inútil pues no es usada con tanta regularidad a lo largo de los días pero sí no conocemos nuestro pasado no podremos aprender para acciones futuras y sino conocemos las reglas matemáticas básicas no entenderemos por qué hacemos determinadas operaciones.
Al final aprender es bueno, se aprenda lo que se aprenda (dentro de la legalidad) y si algo te hace feliz debes intentarlo pues no sabes qué ocurrirá dentro de varios años. No debemos encasillar una carrera o un grado solamente una oportunidad laboral, pues éstas pueden tener un gran abanico de posibilidades.
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